Todo lo que debes saber sobre la nueva ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal

De todos es sabido que los pagos en efectivo tienen sus días contados. Prueba de ello es la nueva Ley 11/2021, de 9 de julio, una ley de medidas de prevencióny fraude fiscal, que reduce el máximo de pago en efectivo, situándolo en 1.000 euros. Esta cantidad es la establecida para pagos y cobros realizados en España, mientras que, para los pagos y cobros realizados a nivel europeo, la cifra asciende a un máximo de 10.000 euros

Esta nueva ley, que sustituye a la Ley 7/2012, de 29 de octubre, relativas a la limitación de pagos en efectivo, ya está en vigor desde el pasado 11 de julio. Desde esa fecha, todo aquel que exceda esa cantidad de pago o cobro en efectivo, se enfrenta a diferentes tipos de sanciones.

¿A qué sanciones nos enfrentamos si incumplimos la nueva ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal?

 

Como hemos dicho anteriormente, todo aquel que exceda el pago o cobro de 1.000 o de 10.000 euros, respectivamente, podría enfrentarse a una sanción administrativa de carácter grave.

La nueva ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal establece en el punto 4 apartado 2, cuál es la base reguladora de esta sanción. En este sentido, se tomaría como base la cantidad de dinero pagada o cobrada en efectivo superior a las cantidades mencionadas anteriormente.

De esta forma, tal como se establece en el punto 5 del mismo apartado, se establece que esta sanción será una multa pecuniaria que equivaldría al 25% de la base de la sanción, salvo que exista algún supuesto de reducción en dicha sanción.

¿Cómo beneficiarse de una reducción en la sanción administrativa?

 

Si desconocías la nueva ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal, y has realizado pagos o cobros en efectivo superior a 1.000 euros en los últimos meses, puedes beneficiarte de una reducción de la sanción. Para ello, debes realizar el pago voluntario de dicha sanción antes de que te sea notificada.

En caso de hacerlo, el importe de la sanción se reducirá en un 50%. Además de ello, al asumir la responsabilidad renunciarás a formular alegaciones ya que en caso de formularlas se considerarán como no presentadas.

Todo esto da lugar al agotamiento de la vía administrativa y por tanto, a la terminación del procedimiento sancionador desde el mismo día que se realice el pago, sin que sea necesaria una resolución expresa.